Las consecuencias de no llevar el sujetador adecuado no son sólo la incomodidad; el uso continuado de la talla o modelo equivocados puede llegar a provocar dolores de espalda, roces en la piel y el pezón, también la aparición de zonas duras en el pecho, como consecuencia de un aro que se clava. ¡Así que presta atención!
Hay un punto importante del que nos solemos olvidar, y es ajustar el tirante del sujetador. Muchas veces nos abrochamos el cierre trasero y dejamos el tirante tal cual, así el sujetador se queda suelto y parece que nos está grande. Así que acordaros de utilizar el regulador de los tirantes.
¿Qué cuestiones tengo que tener en cuenta para elegir bien un sujetador?
Si el sujetador deja marcas en la piel, es demasiado pequeño.
En cambio, si al levantar los brazos el sujetador se sube, es demasiado grande.
Estos son dos truquillos básicos y rápidos para saber si estamos usando el sujetador adecuado, pero son muchas más las cuestiones a tener en cuenta:
Por ejemplo si el cierre trasero se sube; si sobresale parte del pecho por fuera del sujetador; si los tirantes se caen, si las copas quedan arrugadas o si se irrita la zona de debajo del pecho...
Hay un punto importante del que nos solemos olvidar, y es ajustar el tirante del sujetador. Muchas veces nos abrochamos el cierre trasero y dejamos el tirante tal cual, así el sujetador se queda suelto y parece que nos está grande. Así que acordaros de utilizar el regulador de los tirantes.
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Para tallas grandes existen los sujetadores reductores, con o sin aro. |
¿Qué cuestiones tengo que tener en cuenta para elegir bien un sujetador?
Si el sujetador deja marcas en la piel, es demasiado pequeño.
En cambio, si al levantar los brazos el sujetador se sube, es demasiado grande.
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Para tallas pequeñas: Triumph Candle Spotlight. Push-Up con Aros |
Estos son dos truquillos básicos y rápidos para saber si estamos usando el sujetador adecuado, pero son muchas más las cuestiones a tener en cuenta:
Por ejemplo si el cierre trasero se sube; si sobresale parte del pecho por fuera del sujetador; si los tirantes se caen, si las copas quedan arrugadas o si se irrita la zona de debajo del pecho...
Parece muy complicado, pero realmente merece la pena; si un sujetador queda demasiado grande, el pecho se mueve demasiado, lo cual puede ser muy molesto provocando roces en la piel o en el pezón. Por el contrario, si el sostén es demasiado pequeño, éste se clava en el pecho (sobre todo los que llevan aro), con las desagradables consecuencias que ya hemos visto.
Claves para elegir el sostén perfecto.
Para conocer tu pecho y evitar todos estos problemas, hay que tener en cuenta dos conceptos básicos: la talla y la copa.
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Para pechos voluminosos: S. 1733 de Pifamil. Suj. de Gran Capacidad sin Aros |
Se podría decir que la talla es simplemente el contorno del torso bajo los pechos; por lo tanto, para averiguarla habrá que medir nuestro torso justo por debajo del pecho. El resultado se contabiliza de 5 en 5 centímetros, por ejemplo una talla 90 será la talla adecuada para una mujer con un contorno de 74 a 78 cm.
El otro concepto importante es la copa, la medida relacionada con el volumen del pecho. Para averiguarla es necesaria una fórmula matemática que relaciona la medida del contorno con la zona del pecho de máxima proyección, que normalmente suele estar a la altura del pezón. Cada talla tiene varias copas, que van desde la doble A a la doble D, y en algunos casos hasta la F.
Tranquila, no tienes que comerte la cabeza con complicadas fórmulas matemáticas, aquí te dejamos una guía de tallas que puede resultarte muy útil.
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Para ir cómoda: Elasticros Nature de Triumph. Suj. de Algodón sin Aros. |
Aunque existe un sujetador para cada ocasión (sujetadores reductores, deportivos, para realzar el escote, para estar por casa...) todos deben tener una cosa en común: tienen que ajustarse al pecho como una segunda piel; han de sujetar, pero sin oprimir.
Si llevas toda la vida soportando pequeñas molestias en el pecho o en la espalda puede ser por estar utilizando un modelo o una talla incorrectas. Puedes pensar que ya te has acostumbrado, ¡pero alucinarás al utilizar el sujetador adecuado!
Por eso, tanto por estética como por salud, atrévete con nuevas marcas, modelos y patrones!!
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